Pensaba que, después de todo el viaje y la experiencia del barco de ida, la vuelta a casa en barco se me haría eterna, pero fue al contrario:
En este barco, los perros estaban dentro del barco y, además, cada jaula individual tenía una cámara con la que, mediante el nº de jaula y a través de la intranet del barco (gratis), se podía acceder en tiempo real, por lo que podía ver a Sheldon sin moverme de mi butaca, pero también podía ir siempre que quisiera. El poder ver a Sheldon en todo momento, me tranquilizó.

Cuando Sheldon se aclimató y se tumbó en su manta, yo me quedé tranquila. Chema ya se había dormido, Sheldon casi también (y tampoco quería ir y despertarlo porque se habría puesto nervioso) y a mí me estaba entrando todo el cansancio del viaje.
Lo siguiente que recuerdo es el mensaje de llegada al puerto de Palma. Llegar a casa fue un momento porque a las 6 de la mañana tampoco hay mucho tráfico.
Durante ese trayecto, llegué a las siguientes conclusiones en lo referente a viajes:
- Viajar con Sheldon ha sido más fácil de lo que me esperaba.
- Este ha sido uno de los mejores viajes en coche.
- Creo que prefiero los viajes más cortos (6-9 días)
- Me apetece probar otros tipos de viaje
Siguiente viaje: Experiencia en Legoland
Viaje anterior: Viena, Praga y Budapest
Día 14 | Primer viaje con Sheldon | Día 0 |
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